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Alemán anuncia la erradicación de la fiebre aftosa en el ganado con pérdida de 24 vidas humanas y 680 mil reses sacrificadas. Aumentó la capacidad eléctrica del país. Empezaron a funcionar 23 presas.

En su campaña por la Presidencia de la República, González Luna recordaba que Acción Nacional había nacido para hacer realidad la reforma agraria en beneficio de los campesinos; que no sirve a los trabajadores el sindicalismo controlado por el Estado; 

que la injusticia social se debe a la corrupción del Gobierno; que los políticos empresarios son el signo más claro de corrupción; que la participación femenina es trascendental, etc.

A lo largo de su campaña el PRI-Gobierno le puso toda clase de obstáculos: boicots de sonido, suspensión del transporte colectivo, prohibición de mítines, etc., hasta encarcelamiento de militantes. 

También organizaba el PRI eventos gratuitos con famosos artistas a la hora de los mítines panistas.

El día de las elecciones no hubo fraude burdo en el D.F., pero se manipularon credenciales de elector, votos de suplantación, credenciales y padrones falsificados pero disimulados, gracias a que los funcionarios de casilla eran del PRI, quienes marginaron (ya no expulsaron) a los representantes panistas. 

En la Provincia, como siempre: el fraude tradicional y agresivo del caciquismo.

Relevante fue la actuación de Roberto Cossío en la Comisión Federal Electoral. Al PAN se le aceptaron cinco triunfos y el Colegio Electoral dejó pendientes cinco claros triunfos panistas.

En la declaratoria oficial de Adolfo Ruiz Cortines como Presidente Constitucional, los diputados del PAN votaron valientemente en contra, lo que seguramente influyó contra el reconocimiento de los “distritos pendientes”.

Alan Riding afirma que Alemán dirigió al gobierno hacia la derecha. 

Con las arcas del país llenas al final de la guerra, Alemán pensaba que las ventajas competitivas se acabarían pronto; el principio conductor del régimen sería el desarrollo en lugar del nacionalismo; se protegió a los agricultores comerciales de la expropiación y se estimuló el cultivo para exportación; las obras públicas enriquecieron a muchos funcionarios y el propio Alemán compró gran parte de Acapulco antes de la construcción del aeropuerto, de la costera y de la carretera de unión con la Ciudad de México. 

Como el ejército ya no representaba una amenaza, los funcionarios podían avocarse a los negocios sin tener que hacerlo en la política.