A fin de abatir
los altos índices inflacionarios en el país, De la Madrid había implementado el
Programa Inmediato de Reordenación Económica (PIRE) durante los primeros años
de su Gobierno.
Dicho programa alcanzó algunos éxitos en los primeros años, pero
a principios de 1986, con la caída de los precios del petróleo a nivel
internacional, fue necesario implementar uno nuevo, conocido como el Programa
de Aliento y Crecimiento (PAC), el cual buscaba alcanzar simultáneamente un
desarrollo con estabilización.
Este programa resultó fallido y en 1987 los índices inflacionarios fueron
de los más altos que se hayan visto en México.
Dado que las
elecciones presidenciales se efectuarían en este año, se hacía imprescindible
controlar por algún novedoso y eficaz medio al enemigo de la inflación.
La innovadora
respuesta fue el Pacto de Solidaridad
Económica (PSE), firmado en diciembre de 1987, con el cual se pretendía
indexar, al año siguiente, los precios y tarifas del sector público;
se
acordaron aumentos hasta del 85 % en algunos casos, mientras que para los
salarios se decretaba un aumento inmediato del 15 % y otro del 20 % para enero
de este año; al tipo de cambio se le toleró una devaluación del 22 %, y la
iniciativa privada se comprometía a moderar la variación de todos los precios,
aún cuando no existiera un compromiso explícito de control de precios.
Este pacto resultó
funcional, y en febrero se concertó nuevamente con los sindicatos, los campesinos
y los empresarios, aprovechando el alto grado de control del PRI-Gobierno sobre
varios de estos núcleos, una desaceleración gradual y sostenida de la
inflación, para lo cual estos sectores aceptaron que sus precios evolucionaran
de acuerdo a los precios y tarifas del sector público.
Como el tipo de
cambio y los precios del sector público permanecerían invariables hasta el mes
de agosto, en la práctica hubo un congelamiento de precios por parte del sector
privado durante ese mismo periodo.
Por excepción, se concedió un aumento del 3
% en los salarios para el mes de marzo.
El PSE fue
renovado en mayo para los siguientes tres meses, y luego, en agosto, se volvió
a renovar para lo que restaba a la administración de De la Madrid, hasta
diciembre.
Estas renovaciones se
mantuvieron dentro del esquema de la segunda fase; esto es, control de tarifas,
tipo de cambio, precios y salarios, y disminución del déficit público por menores gastos, aumento de ingresos y
desprendimiento de empresas en manos del Estado.[1]
Durante el sexenio
de Miguel de la Madrid (1982-1988) no hubo crecimiento económico y el producto
por habitante retrocedió en - 2.3 % promedio anual; la inflación fue la mayor
en México en las últimas décadas:
83. 4 % promedio anual; la devaluación del
peso frente al dólar fue de 1,450 % y el poder adquisitivo de los trabajadores
cayó en 45 % aproximadamente, es decir, la mayor pérdida de nivel de vida para
los sectores obrero y campesino bajo un gobierno del México contemporáneo.
Al interior del
PRI se suscitaron fuertes divisiones previas a las elecciones, pues surgió la
“Corriente Democratizadora”, que culminaría con la creación del Frente
Democrático Nacional (PPS, PARM, PFCRN, “corriente democrática” del PRI y otras
corrientes de origen marxista) que postularía para la Presidencia de la
República al Ing. Cuauhtémoc Cárdenas, hijo del ex-presidente Lázaro Cárdenas.
Luis Echeverría impulsó a Cuauhtémoc Cárdenas en 1988
Es interesante que haya sido el propio Alejandro Gertz
Manero, secretario de Seguridad Pública del gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas en
el Distrito Federal, quien escribiera en su libro “México: perfil de un rostro
oculto” (Lasser Press, 1992), ya retirado de la circulación, que el
ex-presidente Luis Echeverría impulsó a Cuauhtémoc Cárdenas en 1988 y que el gobierno y el PRI dejaron crecer a
Cárdenas como candidato del Frente Democrático Nacional con la finalidad de
frenar a Clouthier.
En efecto, Cuauhtémoc Cárdenas recibió recursos de los
partidos satélites del gobierno que sospechosamente se independizaron del
oficialismo, pero conservando subsidios y registros que le fueron entregados a
Cárdenas para que hiciera su campaña sin que la administración pública se
opusiera.
Aludiendo a Porfirio Muñoz Ledo, Gertz señala que el sustento
ideológico y la organización del nuevo cardenismo quedó a cargo de un hábil y
ambicioso político de origen priísta, que logró tener puestos de gran
importancia durante el régimen de Luis Echeverría.
La campaña de Cárdenas se inició en forma muy deslucida,
teniendo que suspender en varias ocasiones sus mítines por falta de
correligionarios;
sin embargo, esta situación no se prolongó, ya que al poco
tiempo se empezó a ver cierta organización y dinero en esta estructura
política, mientras los líderes populares que eran afectos al ex-presidente
Echeverría comenzaron a expresarle su apoyo al “neocardenismo”.
Así, mientras, la maquinaria oficial seguía funcionando en contra de Clouthier, el “neocardenismo” se inició utilizando a
los partidos satélites del gobierno y alimentados por la Secretaría de
Gobernación.
Además, Gertz asegura que Echeverría controlaba La Laguna,
región en donde se votó masivamente por Cárdenas.
Por otra parte, la
inclinación de Miguel de la Madrid por Salinas de Gortari había inquietado al
grupo de riquísimos y ambiciosos caciques políticos y sindicales, que sabían
que Salinas no iba a ser dúctil ni manejable, pues éste había encabezado la
mayoría de las batallas para independizar al presidente en turno y a su grupo
de todos sus antecedentes políticos y caciquiles.
Gertz también afirma que la política de Lázaro Cárdenas
fue de corte totalitario y primitivo, contraria a la modernidad y a la
democracia, y que convirtió a México en un país dependiente de la economía
estadounidense.
En efecto, Gertz sostiene que “el aval” del gobierno de
Roosevelt al General Lázaro Cárdenas se basaba en “la notoria filiación de
izquierda” del presidente estadounidense
y en que este plan habría de traerle grandes beneficios a la economía
estadounidense, pues convertiría a México en un país dependiente de sus
vecinos;
cuando se desarrollaba el proceso de nacionalización impulsado por
Lázaro Cárdenas, éste se debió haber sentido muy satisfecho con su triunfo y
muy agradecido con el apoyo de Roosevelt, sentimiento que demostró al respetar
muchos latifundios estadounidenses que quedaron prácticamente incólumes, a
pesar de su furia expropiadora en el campo, al igual que las empresas mineras
de esa nacionalidad, que tampoco fueron tocadas.
En entrevista con el periódico
La Crónica, Gertz declaró sentirse
muy orgullo de lo que había escrito y que el apoyo de Echeverría a Cárdenas en
1988 es un hecho histórico.[2]
En este contexto,
Clouthier comienza a recorrer toda la República, haciendo campaña con ideas
como las siguientes:
El régimen utiliza formas fascistas de represión, porque es
fascismo puro cerrarnos los medios de comunicación
Si ganamos las elecciones, implantaremos una verdadera
acción antiinflacionaria, basada en una real austeridad del Gobierno y no sólo
el sacrificio para los obreros… congelaremos los salarios del Presidente y de
los Secretarios de Estado y altos burócratas
El Ejército Nacional debe dejar de ser policía o promotor
electoral priísta y encargado de la logística del candidato oficial, para ser
un auténtico defensor de la democracia, del Sufragio Efectivo y del
pluripartidismo
El PRI-Gobierno se entromete en las universidades al igual
que lo hace en los sindicatos y en las organizaciones campesinas, con la única
intención de manipular.
Se debe respetar la autonomía universitaria y las
resoluciones que salgan de su seno
La empresa cumple una gran función social y económica para
el desarrollo del país…
las relaciones entre obreros y patrones tienen que ser
cordiales, preocupándose ambos por el buen desempeño de la empresa, pues ambos
la sostienen y la necesitan
El Gobierno nos quiere engañar con su mismo cuento; por un
lado, nos escucha y dice estar preocupado por nuestras quejas y, por otro, nos
reprime
… yo no les ofrezco milagros, ésos los hace El de Arriba, y
si los hay, es porque primero los de abajo hicimos algo
… esto ya nadie lo detiene
De llegar a la presidencia de la República, se liquidarán
todas las empresas paraestatales improductivas que no sean estratégicas ni
prioritarias…
el Estado debe ser rector de la economía, no actor absoluto de ella
Es muy lamentable que en obvia violación a la soberanía
nacional, el vicepresidente George Bush dé por un hecho que Salinas será
Presidente…
aquí se ve claro quién es el que tiene nexos con los
norteamericanos, ¿ es el PAN como dicen algunos, o son ellos ?
Siento admiración por este pueblo (de
Chihuahua) al que nada le ha sido
obsequiado; ni la naturaleza, ni el centralismo político le han facilitado las
cosas…
Vengo a sumarme a sus esfuerzos, a ser un voluntario más en esa noble
lucha que desde 1983 sostienen por recuperar sus libertades y derechos, en esta
entidad insignia de la democracia
Magnates escleróticos del sindicalismo oficialista son los
líderes que traicionaron una vez más los intereses del trabajador al hacerse
cómplices de las políticas económicas, demagógicas y populistas que provocaron
la crisis grave que estamos viviendo
Acción Nacional siempre ha defendido la autonomía del
sindicalismo…
El régimen proclama que “en el ejido ni un paso atrás”,
mientras los hambrientos ejidatarios de estos lugares (Zacatecas)
dan muchos pasos adelante fuera del
territorio nacional, buscando oportunidades para sobrevivir aun a costa de la
violación de sus derechos
Las maquiladoras no sólo deben estar en la zona fronteriza,
sino debe fomentarse en otras regiones, pues lo que se requiere es la
generación de fuentes de empleo
Los impuestos
deben quedarse en los Estados, para ser invertidos donde se generan…
el
federalismo debe convertirse en una serie de acciones encaminadas a hacer de
los Estados y municipios entidades totalmente autónomas, con recursos propios y
capacidad para establecer sus propia políticas financieras y de crecimiento.
Combatir el narcotráfico es indispensable, pero se requiere
de voluntad para hacerlo; todo mundo sabe quiénes son y en dónde están los
traficantes, y las corporaciones policiacas son las primeras en estar enteradas
Clouthier expone
sus Diez
puntos de gobierno:
hacer realidad el Federalismo y el Municipio Libre;
democratizar al Distrito Federal;
adecuar las relaciones Iglesia-Estado sobre la base de los derechos humanos y
de la libertad de conciencia;
renegociar con criterio de equidad y justicia la
deuda externa y la deuda interna; acabar con la inflación cuyo origen real es
político; hacer realidad el principio de Tierra y Libertad, dando la propiedad
de las parcelas a los ejidatarios, y que los campesinos decidan por sí mismos
el régimen de tenencia de la tierra que deseen;
lograr riqueza distribuida;
combatir la degradación del medio ambiente; seguir impulsando los libros de
texto gratuito, pero no únicos ni obligatorios;
asegurar la participación de
padres de familia, maestros y expertos en la elaboración de planes de estudio;
restaurar la seguridad pública; democracia reflejada en las relaciones
obrero-patronales, en el respeto a las
comunidades indígenas;
revisar el papel de CONASUPO; política exterior
congruente, dando prioridad a las relaciones con Latinoamérica y apoyando la
paz en Centroamérica, entre otros tantos puntos.
Maquío reta a Carlos Salinas de Gortari a un debate público,
pero este rehúye.
Clouthier luchó
por abrir los medios de comunicación a la oposición: en León, tres estaciones
de radio le cancelaron entrevistas acordadas previamente; en Campeche le
sucedió algo semejante; las líneas telefónicas del partido fueron bloqueadas
súbitamente;
realiza un mitin de protesta frente a la Secretaría de
Gobernación, luego frente a Televisa y concluye con una marcha hasta el Zócalo.
En Mérida, encabeza una impresionante manifestación silenciosa, en protesta contra
el cierre de las estaciones de radio y TV para el PAN.
Acción Nacional
promueve un boicot contra la parcialidad de “24 Horas” de Jacobo Zabludovsky y
de los otros noticieros de Televisa, monopolio cuyo presidente, Emilio
Azcárraga, se había declarado “soldado del PRI”.
En otras
ocasiones, a Clouthier le bloquearon el acceso a locales públicos, a
universidades, y hasta a instalaciones particulares aún pagando el servicio
como cualquier cliente.
Ante la hostilidad
gubernamental contra sus tierras y empresas, Clouthier decide vender sus
propiedades para evitar problemas a su familia.
La estrategia de
Maquío incluyó el “empalme” de su campaña con la de Salinas de Gortari, como
medio de presión.
En marzo, coincidiendo en Ciudad Juárez con Salinas, encabezó
grandes mítines para protestar contra la violencia hacia Acción Nacional; las
agresiones provenían de los “Comités de Defensa Popular” y de gente de la CNOP,
con golpeadores auspiciados por el PRI y por el Gobierno de Chihuahua.
Clouthier fue recibido por una inmensa caravana desde el aeropuerto hasta la
ciudad; la comitiva panista fue agredida a
pedradas, muriendo una joven de 16 años de edad.
En marzo, varias
organizaciones ciudadanas independientes, deciden apoyar a Clouthier:
Desarrollo Humano Integral y Acción Ciudadana (DHIAC), Acción Universitaria,
Civilización y Libertad, y la Asociación Nacional Cívica Femenina (ANCIFEM).
En mayo, el PAN
con su candidato, organizó un estrangulamiento de carreteras, protestando
contra el fraude electoral en Monclova; la movilización fue un éxito y se
bloquearon 70 de las 75 principales carreteras del país, por algunas horas.
En
junio, se forma una gran cadena humana (la más grande del Distrito Federal),
desde Nonoalco hasta San Ángel, exigiendo democracia.
En junio,
Clouthier presenta ternas de nombres para cada uno de los puestos de su posible
gabinete presidencial, ante medios de difusión, cuerpo diplomático, iniciativa
privada, ejército, e Iglesia.
Clouthier llevó a
cabo actos multitudinarios en distintas ciudades; el Toreo de “Cuatro Caminos”
fue abarrotado con 25 mil asistentes, cerrando su campaña en el Zócalo de la
Ciudad de México con 200 mil asistentes, después de haber recorrido 53 mil
kilómetros, realizado 79 marchas y 159 mítines.
En la XXXVII Convención Nacional del
PAN, Luis H. Álvarez advirtió sobre la trampa que significaba el sistema de
representación proporcional, en cuanto podía servir al Gobierno para deteriorar
a los partidos interiormente, por tanto, había que evitar caer en ese juego.
Las elecciones del 6 de julio
transcurrieron, en general, de manera pacífica.
En las zonas rurales el PRI
realizó el fraude electoral a su antojo, con muchas casillas con un número de
votos terminado en cero, lo cual es estadísticamente injustificable.
El Gobierno no
cumplió su compromiso de dar resultados preliminares a las 18:00 horas.
Los
partidos políticos tenían acceso al centro de cómputo del Registro Nacional de
Electores, pero repentinamente se bloqueó el acceso a las terminales de cómputo
y al propio recinto. Posteriormente se anunció:
“se cayó (¿o se calló ?) el sistema” de cómputo.
Lo más probable es
que primeros los votos para la oposición hayan sido muy superiores a los del
PRI, por lo que no se quiso correr el riesgo de esperar a que la Secretaría de
Gobernación cerrara la información para “revisar” las cifras.
Esto se confirma
dado que hubo tres días de silencio absoluto, aprovechados, seguramente, para
“arreglar” la elección.
A las 10:00 de la
noche del 6 de julio, Manuel Clouthier, Cuauhtémoc Cárdenas (FDN) y Rosario
Ibarra (PRT) emiten el documento Llamado
a la Legalidad denunciando el gran fraude electoral y en protesta, lo
entregan a Manuel Bartlett, Secretario de Gobernación.
A la 1:00 A.M.,
aparece en televisión Carlos Salinas de Gortari anunciando su triunfo “claro,
legal e inobjetable”, reconociendo que había
terminado la etapa del partido
prácticamente único.
desde el mismo 6
de julio se descubrieron impresas las
revistas Impacto y Jueves de Excélsior, con resultados
electorales y, por otra parte, el Gobierno había ordenado cambiar el encabezado
del periódico Excélsior del 7 de
julio, que mencionaba los triunfos de la oposición.
El 9 de julio el
PAN organiza una imponente marcha desde del Ángel de la Independencia al Zócalo
con la gente que entrelazaba sus manos y entonando el Himno Nacional frente al
Palacio Nacional. Durante el mitin Maquío lee un Manifiesto a la Nación en el que proclama:
El retardo de la Comisión Federal Electoral para difundir
cifras preliminares de resultados y la negativa del Secretario de Gobernación
para dar a conocer las tendencias de la votación la misma noche de los
comicios, son testimonio contundente del derrumbe histórico del PRI-Gobierno…
Desde la noche del mismo miércoles 6 de julio, en diversas
regiones del país se están suplantando y recomponiendo los paquetes electorales
de las casillas, con el objeto de falsear los resultados originales de la
votación.
Debemos impedir ese nuevo ultraje: convoco a todos los
mexicanos, para que a partir de este momento nos declaremos en resistencia civil activa y pacífica, denunciemos
la injusticia electoral y rechacemos la imposición de autoridades ilegítimas…[3]
Tres días después,
Clouthier muestra al Presidente de la Madrid un letrero: Cumpla su palabra, superando al cuerpo de seguridad del presidente,
después de realizar un plantón frente al Palacio de Bellas Artes.
Clouthier afirma: No puedo declarar la victoria, pero me
encuentro imposibilitado para reconocer el triunfo en los otros contendientes.
Después de realizar un recorrido por el país para hacer una consulta popular,
constata que el pueblo no reconoce como
válidas las elecciones del 6 de julio, por lo que demandaría al Colegio
Electoral la repetición del proceso.
El 15 de agosto Clouthier enviaría la carta
pública Por la nación y la Justicia
al Presidente De la Madrid, sobre la necesidad de convocar a nuevas elecciones.
El 21 de agosto,
durante los trabajos del Colegio Electoral, Abel Vicencio Tovar y 30 diputados
intentan entrar a revisar los paquetes electorales
custodiados por el ejército en el
sótano del Palacio Legislativo; Vicencio Tovar pidió a los soldados que le
dieran el paso, pero éstos cortaron
cartucho y apuntando con sus armas se lo impidieron.
Emilio Krieger,
magistrado del Tribunal de lo Contencioso Electoral, afirma que este es un órgano inútil e hipócrita y renuncia a
su cargo.
El 31 de agosto,
en medio del caos y de apasionados debates, el Colegio Electoral emite su
dictamen: PRI, 260 diputados, 234 de mayoría y 26 plurinominales; PAN, 101
diputados, 38 de mayoría y 63 plurinominales; FDN, 139 diputados, 29 de mayoría
y 110 plurinominales. El PAN se retiró de esta sesión.
El Instituto de
Proposiciones Estratégicas publica un estudio en el que se aplica el análisis
matemático a los resultados oficiales de las elecciones, encontrando una
tendencia que indica que alrededor de una tercera parte de la votación fue
alcanzada por cada uno de los tres principales candidatos a la Presidencia de
la República: Clouthier, Cárdenas y Salinas de Gortari, respectivamente.
Este
estudio concluye que:
1. Se puede afirmar, con certeza
estadística, que hubo graves alteraciones de la votación real en las elecciones
de julio de 1988.
2. Las alteraciones masivas fueron
decisivas para modificar los resultados reales y sustanciales de la votación en
lo que se refiere a diputados y senadores.
3. En la Cámara de Diputados, la suma de
las curules del PAN y del FDN, habrían
tenido mayoría sobre el PRI, si no se hubiera dado la alteración masiva y
evidente de las actas de 58 distritos electorales.
4. Los resultados del análisis matemático
permiten afirmar, coincidiendo con la investigación de CIPAI, que las
alteraciones son decisivas en lo que se refiere a diputados y senadores, y
grandes, aunque no decisivas, en lo que se refiere a candidatos presidenciales.[4]
A esto hay que
agregar que en la evaluación de las
elecciones de julio de 1988, fue notoria la negativa del Tribunal de lo
Contencioso Electoral, y de la mayoría priísta en el Colegio Electoral, de
abrir los paquetes electorales, que son documentos públicos de primer orden,
dentro de la definición del mismo Código Federal Electoral.[5]
Durante su VI
Informe, Miguel de la Madrid es interrumpido 17 veces por miembros del FDN y
los diputados del PAN exhiben boletas electorales falsificadas y utilizadas en
las pasadas elecciones.
El 9 de
septiembre, en caótica sesión de la Cámara de Diputados, Carlos Salinas de
Gortari es declarado presidente electo; el diputado priísta José Murat lee el
inentendible dictamen, luego de que la diputación del PRI, auxiliada por
agentes de seguridad, tomara por la fuerza la tribuna.
El PAN vota en contra
del dictamen y la diputación del FDN se retira de la escandalosa sesión.
El 15 de
septiembre Clouthier da el “Grito de Independencia” al pie del Ángel, y al
igual que el Cura de Dolores, proclama:
¡Viva
la Virgen de Guadalupe!
El 19 del mismo mes, son desalojados violentamente
los panistas acampados alrededor del Monumento a la Independencia, por la
fuerza pública.
A fines de octubre
se hace un merecido reconocimiento a Manuel Clouthier por su extraordinaria
campaña, durante la reunión del Consejo Nacional del PAN;
en virtud de las
nuevas condiciones políticas, se vuelve a considerar la conveniencia de aceptar
el financiamiento público para los partidos
políticos previsto en la Ley Electoral;
se decide aceptar el financiamiento y se crea una Comisión para
cuidar de los fondos, los cuales sólo se utilizarían para mejorar
infraestructura inmuebles, capacitación, etc.) y no para gasto corriente.
En noviembre, el
PAN hace público el documento Compromiso
Nacional por la Legalidad y la Democracia, en el que afirma la ilegitimidad de origen del nuevo Poder
Ejecutivo Federal;
recuerda que los resultados oficiales de las elecciones
pasadas fueron aprobados exclusivamente por los votos del PRI en el Colegio
Electoral;
el nuevo Gobierno sólo podrá legitimarse con un ejercicio honesto
del poder, en particular en las próximas elecciones de Jalisco, de Guanajuato y
de San Luis Potosí, por lo que el PAN se opondrá a los actos de Gobierno que
vayan en sentido contrario;
Acción Nacional exige al nuevo Gobierno la
discusión pública de su temática propuesta.
Carlos Salinas de
Gortari respondió inmediatamente a esta propuesta, invitando a un diálogo
inmediato y directo con la directiva del PAN, la cual fue aceptada con la
condición de tener un diálogo público y sincero.
En diciembre se realizó el
encuentro entre el PAN y el Gobierno; Acción Nacional expresó su rechazo a
ciertos miembros del gabinete y a la actitud de los medios de comunicación, de
los que exigió apertura a la oposición;
criticó la ausencia de federalismo y
propuso reformar la Ley Electoral, así como la periodicidad y sistematización
de este diálogo.
El 15 de diciembre
Clouthier se declara en huelga de hambre
al pie del Ángel de la Independencia, en solidaridad con los pueblos de
Guanajuato, de San Luis Potosí y de Zacatecas, en donde, a pesar de las
recientes promesas presidenciales, hubo irregularidades en las elecciones.
Clouthier también exigía una reforma electoral a la brevedad; levantó su ayuno después de 177 horas, luego
del anuncio de reforma de la Ley Electoral por parte del Gobierno.
[1] Cartas, José María. Orden
político y orden económico en México, op. cit., p. 90
[2] Cf. Periódico La Crónica,
Año III, Nos. 1030 y 1031, 26 y 27 de abril, México 1999
[3] Manifiesto
a la Nación, leído por Manuel
Clouthier el 9 de julio de 1988, durante el mitin del PAN en protesta por el
fraude electoral del 6 de julio, publicado en La Nación, Órgano Oficial del Partido Acción Nacional, Año XLVI,
Nos. 1759-1760, 15 de julio, México 1988, 3ª de Forros
[4] Instituto de Proposiciones Estratégicas. Elecciones Federales de México: Julio de 1988, Interpretación de los resultados oficiales mediante el análisis
matemático, México 1988, p. 44
[5] Auping, Juan e Inda, Caridad. La Resistencia Noviolenta y Activa, Ceps-Cáritas Mexicana, México
1989, p. 53
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